México venció a Arabia pero aún así está fuera de Catar 2022
La aventura del Tri en Catar 2022 llegó a un final más precoz en comparación con las ediciones anteriores, pues aunque venció 2-1 a Arabia, no calificó a Octavos de Final debido a la diferencia de goles.
El equipo de Gerardo Martino, quien se convirtió en uno de los peores estrategas en la historia del Tri, necesitaba golear 4-0 para garantizar su pase sin importar el escenario, o bien rezar por combinaciones con tal de llegar al cuarto partido.
Los aztecas salieron con cambios importantes, incluido el regreso de Edson Álvarez, además de la incorporación de Jorge Sánchez y Henry Martin, quienes también disputaron el primer encuentro, y la aparición de Orbelín Pineda.
Fue este último quien junto a Luis Chávez le imprimió vida a una media cancha que perdió mucha velocidad en los duelos anteriores donde estuvo Herrera. Muy pronto el equipo comenzó a generar y el arquero rival debió salir a cortar un mano a mano con Alexis Vega, quien tiene la mira puesta en ya no regresar a nuestro país.
Los de verde probaron mediante distintos medios, incluida la pierna zurda del jugador tuzo, quien tocó la puerta desde lejos.
A pesar de todo, el medio tiempo terminó 0-0 a la par del duelo entre Argentina y Polonia, donde Messi falló un penal que pudo significar la diferencia para los nuestros.
Para la segunda parte, la Albiceleste, que ahora vistió de morado, se adelantó gracias a McAlister, y a los pocos minutos apareció Henry Martín para empujar un balón parado, lo que significó el primer grito en el torneo y también la esperanza, pues la diferencia de goles con los europeos se acortaba.
Poco después llegó Luis Chávez con su prodigiosa pierna para marcar de tiro libre uno de los goles más bellos del torneo, donde parecía que seguiríamos con vida gracias a un nuevo tanto argentino, esta vez de Julián Álvarez.
En ese momento, polacos y mexicanos empataban en puntos, duelos directos, goles anotados y diferencia de los mismos, por lo que el criterio quedaba en el Fair Play, donde los europeos llevaban ventaja, lo que obligó a buscar un gol más, esperar el de Argentina o de plano rezar por un milagro y que expulsaran a alguien de Polonia.
El Tata realizó cambios que al igual que en sus juegos previos resultaron cuestionables. Sacó a Henry y Orbelín, quienes estaban generando peligro, y metió a Charly Rodríguez y Raúl Jiménez, que brillaron por su ausencia.
Todavía se atrevió a jugar con dos puntas, dándole a Rogelio Funes Mori sus primeros minutos del torneo, además de darle tiempo a Uriel Antuna, sin embargo este último falló una buena opción a pase del Chucky Lozano, que lo dejó frente al arco.
El arbitraje también le negó el grito a la afición, pues anuló dos goles por fuera de lugar y no revisó una mano en el área, aunque dicho sea de paso, sus decisiones fueron acertadas.
Con el partido terminado entre sus rivales de grupo, México necesitaba sí o sí el tanto del pase, sin embargo un gol árabe los mandó a la lona, aunque irónicamente este no cambiaba nada el trámite del encuentro, pues los aztecas seguían necesitando solamente un tanto para calificar.
Finalmente el colegiado pitó el final, y con ello se consumó el mayor fracaso futbolístico desde 1978. México vio cortada su racha de pasar a siguiente ronda y por primera vez desde dicho año se quedó en la Fase de Grupos, aunque hay que tomar en cuenta que en España 1982 e Italia 1990 no calificaron a la competencia por distintos motivos.
Infaltable en Octavos desde 1994, el equipo vio cortada una envidiable racha que compartía con Brasil y se despidió del torneo, mientras que Gerardo Martino dejó entrever que no regresará al banquillo tricolor, aunque siendo honestos, difícilmente habrá alguien que lo quiera de vuelta.