México es un país que históricamente nos ha dado grandes porteros, esos héroes un tanto silenciosos que jamás deseas que aparezcan, pero te alegra que lo hagan cuando es necesario. Un debate común es quién de ellos ha sido el mejor de la historia.
Muchos podrán decir que Guillermo Ochoa se lleva el puesto gracias a sus actuaciones en las últimas dos Copas del Mundo, sin embargo, una historia difícil de olvidar por lo inesperada que fue es el hecho de que Paco Memo pudo ser titular en tres mundiales hasta que Javier Aguirre dio la gran sorpresa con una cuestionable decisión.
Sabemos que todas las Copas del Mundo tienen convocados que no se entienden, y probablemente jamás se entenderán, como la vez que Ricardo La Volpe se llevó al Chiquis García a pasear a Alemania en vez de llevar a Cuauhtémoc. También sabemos que los técnicos están casados con ciertas ideas y les gusta utilizar jugadores que sean totalmente de su confianza, como parece que ocurrió en este caso.
Pero vayamos un poco más al contexto. La Copa Mundial de Sudáfrica 2010 estaba a la vuelta de la esquina, México había tenido una eliminatoria por demás difícil donde tuvo tres técnicos fijos en menos de cuatro años. Primero llegó Hugo Sánchez, que fracasó en el Preolímpico, posteriormente Sven Goran Eriksson, que se marchó tras dejar una situación crítica rumbo al mundial, y finalmente llegó Javier Aguirre, quien ya había sido bombero a principios del milenio, para enderezar el barco.
México se la jugó con el cuchillo entre los dientes. Consiguió su pase en segundo lugar tras haber coqueteado con el repechaje durante varias jornadas y se apuntó el boleto a la justa más importante de todas.
Ochoa, quien ya había sido banca en Alemania 2006, apuntaba a ser ahora el guardián de la portería. Le había ganado la carrera en el arco a Oswaldo Sánchez y Jesús Corona, sus más cercanos competidores, y había sido utilizado por El Vasco a lo largo del Hexagonal y la Copa Oro 2009 donde el Tri se coronó campeón.
Llegó entonces la hora de definir a los once iniciales, y para sorpresa de propios y extraños, Óscar Pérez, legendario arquero del Cruz Azul, fue el elegido para enfrentar a Sudáfrica. La decisión fue cuestionada, no tanto porque el Conejo no fuera una garantía en el arco, sino por lo impensada y un tanto injusta que fue, además de la diferencia de edad, pues en ese momento Memo tenía 25 años y Pérez 37.
Tal vez eso motivó la decisión de Javier Aguirre, pues la presión de inaugurar la Copa del Mundo ante el anfitrión requería de experiencia y seguridad, además de que el Conejo era un arquero de todas las confianzas del Vasco pues lo alineó durante la Copa del Mundo de 2002, lo que es un hecho, es que el veterano arquero respondió y no lo hizo mal, pues el único gol que recibió en ese partido fue un verdadero trallazo imparable.
Aguirre jamás quitó a Óscar del puesto. Contra Francia se fueron en ceros y posteriormente ante Uruguay caerían con un cabezazo de Luis Suárez, finalmente ante Argentina fueron eliminados 3-1 sin que hubiera mucho que hacer.
Respecto a lo ocurrido, varias son las voces que tienen algo que contar. Mario Carrillo, auxiliar en ese torneo, y que también había dirigido a Ochoa en el América explicó que le pidió al Vasco reconsiderar la posición pero este se negó.
“Le metía cartas por debajo de la puerta y le hablaba de lo que fue él en América. Javier pasó por alto todo eso y prefirió a Óscar Pérez, a quien más conocía”.
A su vez, el arquero que fue titular narró su sentir en una entrevista.
“Antes de empezar el Mundial yo ya tenía ese nervio de poder empezar como titular. Ya íbamos al estadio cuando Javier me dijo “a ver cabrón, no la puedes cagar. ¡No la puedes cagar! La cagas y ni tú ni yo regresamos a México”.
Al final, toda la decisión se basó en una cuestión de preferencias y confianzas, Aguirre no tocó el tema y Ochoa lo único que comentó fue:
“Jugué todos los partidos de la fase de clasificación con Javier Aguirre y cuando llegó el Mundial pensaba ser titular. No esperaba ser suplente. Todavía desconozco las razones y no he pedido explicaciones. Pero eso me dejó huella”.
Aguirre y Memo se volvieron a encontrar este torneo cuando el Vasco regresó para dirigir al Monterrey, tal vez la relación entre ellos ya ha sanado, pues como todos sabemos, 2014 y 2018 pagaron su deuda con el arquero americanista, citas donde jugó a un gran nivel bajo los tres postes.
¿Quién crees que debió ser el titular de México en Sudáfrica?
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